Plegaria de Bilwi

martes, 29 de mayo de 2012

El Miguel Angel del Rio Wanky, Nicaragua


Por: Walter Úbeda Martínez
“Un tío mío, hermano de mi padre,  en días de Semana Santa,  bajo al Rio Wanky a bañarse, al poco tiempo, mi tío gritaba y pedía auxilio y llamaba a mi abuelita para que lo auxiliara, mi padre nos cuenta que él salió corriendo al Rio Wanky  y vio que su hermano se empezaba a convertir en sireno, por las partes de sus piernas, decía  mi padre ,  que para que mi tío no se convirtiera en sireno, le empezó a pegar golpes y palmadas en las piernas, y las partes transformadas en sireno desaparecieron, a mi me enseñaron mis padres, que la liwa Mairin( sirena), se lleva a los hombres  y los transforma, pero personalmente yo nunca la he visto, todo esto sucedió en la comunidad Miskita de San Carlo,  rio coco arriba.”
Son leyendas ancestrales del pueblo Miskito, que toman vida, en las artesanías de madera del comunitario Miskito, don Wingard Wilson Zepeda de 72 años de edad, nacido en la comunidad de San Carlos, rio coco arriba y narrador de esta historia. Nos cuenta don Wingard  Wilson que las leyendas ancestrales del Pueblo Miskito, se heredan de generación en generación, es parte de nuestra cultura, nos expresa este humilde artesano, quien es un Personaje en Colores, que vive en la actualidad en la ciudad de Bilwi.

Su rostro apacible,  parece ser un reflejo de las aguas mansas del rio Wanky, su mirada existencial se detiene en su mas preciado tesoro, entre sus manos sostiene recuerdos de su infancias que aun perduran y  para don Wingard  Wilson esa es la razón de su existencia.

¿Como llega al mundo de las creaciones de las  artesanías en madera, don Wingard Wilson Zepeda?
 “Mi abuelito de nombre Fedrick Wilson por parte de padre, tenían orígenes Jamaicanos (Jamaiquinos), y  no se a quien se lo heredo él, pero  cuando yo era niño,  miraba a mi abuelito realizar artesanías, él  no tenia un buen acabado, ya que utilizaba una hacha chiquita, pero si les daba formas de animales y personas a los trozos de madera que trabajaba.”

Las condiciones de miseria de las comunidades Miskitas, siempre han existido, ser un joven Miskito y tener vocación de escultor de la madera, no puede verse como una fuente de trabajo responsable.

 ¿Tubo don Wingard Wilson,  oposición  de algún familiar, para que no se dedicara a trabajar en las artesanías de maderas?
“Yo  no tuve ninguna oposición de ningún familiar,  al trabajar con artesanías de madera, mas bien mi abuelito se alegro, porque su nieto continuaría con la herencia de artesano, además en esa época el Reverendo Moravo de nombre Rinckard Watson, le manifestaba que siguiera cultivándose en el arte de la elaboración de artesanías de madera, él me miraba realizar artesanías de animalitos, como tortugas, pescados y decía que en la ciudad de Bluefields existían buenos artesanos y que seria bueno, que yo también me hiciera un buen artesano.”

Lo que antes era un trozo de madera muerta y sin forma, hoy es una mujer tomando wabul sentada en una hamaca, una pareja navegando en un bote sobre el rio Wanky,  o un cazador.

 ¿Que motivaciones tiene don Wingard Wilson, para que estos trozos de madera muerta tomen vida propia?
“Tengo dos motivaciones, la primera es que sus artesanías en madera, son trozos de la cultura Miskita y es para dar a conocer a las personas que compran mis artesanías, como viven y en que creemos  los pobladores Miskitos, y la otra motivación, es la económica,  ya que de las ventas de artesanías sobrevive”

Don Wingard Wilson se emociona al traer a su memoria los recuerdos cuando vendió su primera artesanía de madera, su rostro se ilumina de alegría y se pone a reír, a pesar de que eso fue hace muchos años atrás.

 ¿Como describe este humilde artesano, ese gran momento de su vida?
“Yo me acuerdo de ese momento, cuando vendí mi primera artesanía, era un duri  sirpi (bote pequeño), esa artesanía la vendí en el hospital de Bilwaskarma, a un doctor Norteamericano, que atendía en ese hospital,  yo me emocione porque era la primera ves que vendía una artesanía, el doctor se quedo mirando el barquito le puso la mira fija y me lo compro, yo me sentí muy alegre, porque algo que yo había hecho le había gustado a ese doctor Norteamericano.”

¿En cuanto córdobas lo vendió y que se compro, don Wingard Wilson?
“Yo lo vendí en diez córdobas, eran  bastantes  reales en esa época,”  don Wingard Wilson sigue desenterrando recuerdos de su memoria,  se pone a reír y expresa, “me sentía fachento, con los reales, me compre Plun (Comida) y ropa, yo me sentía alegre con mi ropa nueva y a todo el mundo le decía que había vendido una artesanía.”

A los 18 años don Wingard Wilson bajo del rio Wanky, para trabajar como ayudante de un señor conocido de la familia,  de la comunidad de Kamla, él  acerraba arboles de pino y  de otras especies  de maderas, el recuerda que esto le permitía trabajar, pero al mismo tiempo seguía realizando artesanías, ya que con los trozos de madera que sobraban, el hacia artesanías.

En medio de las aguas mansas del rio Wanky, vemos deslizarse  lentamente un bote, y al frente un Yul (Perro), ¿Por qué siempre aparece un perro, don Wingard Wilson?
“El Yul (perro), es el cuidador eterno del Miskito, es el guía del cazador, pero también es el guía del que va en el bote, siempre va al frente para alertar al remador del bote, sobre cualquier peligro que pueda pasar, la mujer Miskita,  cuando son viajes largos acompaña a su marido, ella siempre camina en le bote una cocinita y si hace wabul o buña (atol en habla miskito), le sirve a su marido , bebe ella y le sirve al perro, si hace pescado asado, también el Yul agarra su pedazo, el perro es parte importante en la vida de los  Miskitos.”

Todo comienza con un trozo de madera color oscuro y tosco, se pasa por la cepilladora, se corta del tamaño de la artesanía, que don Wingard Wilson tiene dibujada en su mente, y con varios formones de diferentes tamaños se va quitando lenta y suavemente,  astillas  tras astillas, el proceso dilata de dos a tres horas, para darle un buen acabado se lija bien la forma humana y el resto de figura que componen la artesanía, se le hace los detalles necesarios al rostro, se le pone sellador y por ultimo se barniza y así lo que era un trozo de madera muerto, ahora  tomo vida propia  en forma de una mujer Miskita  pilando arroz,  del rio Wanky o cualquier otra comunidad Miskita. Para muchas personas un trozo de madera de granadillo no significa nada y lo ocupan hasta de leña para cocinar, para don Wingard Wilson, un trozo de madera de granadillo, es un precioso tesoro de color café oscuro, que cobra vida entre sus manos.

¿Cual es la artesanía que mas le gusta hacer a don Wingard Wilson, y por qué?
“El duri sirpi y las balsas, son imágenes que yo tengo desde niño, ya que los pobladores de las comunidades Miskitas, que viven a la orilla del rio, se movilizan únicamente de comunidad en comunidad sobre el rio Wanky, este es el medio de transporte mas importante, no existe otro, ya que no se cuenta con carreteras, y es por eso que lo elaboro bastante el diri sirpi, en mis artesanías.”

¿Cual el la madera que no le gusta para realizar sus artesanías?
Todas las maderas son un tesoro para mí, aunque hay unas mejor que otras para realizar un buen acabado.
¿Cual es la figura o diseño de  artesanía,  que no le gusta realizar?
“Yo  como artesano puedo elaborar, cualquier artesanía que tengo en la mente, pero siempre hay un animal que no me gusta hacer en artesanía y es el sapo, ese  animal es feo y me  da temor, una vez realicé  una artesanía de un sapo, por encargo  y me  quedo tan igualito el animal que le pegue un machetazo y lo partió en dos, a pesar de ser un encargo de un cliente.”

¿Existe una artesanía que a querido conservar don Wingard Wilson, porque le gusto mucho?
“Siempre he hecho algunas artesanías en madera, que me gustan bastante, pero siempre sale un cliente que insiste en comprarla y por la necesidad económica y no quedar mal con el cliente la vendo, otras veces yo guardo una artesanía porque me gusta mucho y entonces viene mi esposa y la vende, yo no se porque mi esposa siempre hace eso”

¿Ha hecho alguna artesanía con el rostro de su esposa?
“No, no hecho ninguna artesanía con el rostro de mi esposa, porque estoy seguro que el día que la haga, lo quiebra inmediatamente.” Y se puso a reír don Wingard Wilson.

En los años ochentas, en la época de la guerra, don Wingard Wilson, al igual que miles de pobladores  Miskitos del rio Wanki, tubo que ser trasladado obligatoriamente a la comunidad de Sumubila, en Tasba Pri (Tierra libre), municipio de Puerto Cabezas, pero a pesar de las circunstancia de guerra de esa época, don Wingard Wilson recuerda cuando el comandante  Manuel Calderón,(RUFO), le dijo que hiciera un encargo, ordenado por el propio comandante Daniel Ortega, el encargo consistía en realizar diez artesanías de Sandino, el hizo las artesanías y  después le dijeron que cinco artesanías serian para el comandante Tomas Borge y las otras cinco serian para el comandante Daniel Ortega. Otro recuerdo grato fue, su viaje a Noruega, creo que el lugar  exacto se llamaba  Steinkjer, enviado a participar,  por el gobierno Sandinista a un encuentro de artesanos indígenas, aquí participaron indígenas artesanos de toda América.
En los años 90, con el gobierno de la Sra. Violeta Barrios de Chamorro, tubo la dicha de aprender a trabajar artesanía en barro, ya que fue enviado a un encuentro con los artesanos de Masaya, ahí aprendió a utilizar  el barro,  como materia prima para realizar artesanías.

¿Don Wingard Wilson, ha recibido usted algún, reconocimiento, medalla o condecoración de alguna autoridad, MUNICIPAL, REGIONAL  O DEL GOBIERNO CENTRAL?
“No he recibido nada de nadie, solo he recibido felicitaciones de mis clientes, cuando le realizo una artesanía y principalmente son de las personas extranjeras, una de las personas  locales que mas a valorado mi trabajo de artesano , es Doña Alba Rivera de Vallejos, ella me pidió cuando era Gobernadora, que le tallara dos artesanías  en madera,  de tamaño natural, las artesanías que están en la Casa de Gobierno,  de una mujer Miskita pilando arroz y la otra, una mujer   remando en un duri sirpi, fueron realizadas por mi, a solicitud de doña Alba Rivera”
Existen otras personas que han  valorado el trabajo de artesano de don Wingard Wilson  y lo han apoyado con herramientas y compras  de artesanías, la iglesia Verbo de Puerto Cabezas, el doctor norteamericano, Bach, el doctor Happarth y el pastor Wener Mark.

La herencia de trabajar la madera para hacer artesanías, vino de su abuelito paterno. “Yo siempre sueño desde joven, con un señor que no le puedo ver el rostro, él me lleva  a una casa grande, donde hay varias artesanías, estas artesanías están  sin rostros  y sin el acabado, solo tienen algunas formas, pero en el sueño  el señor me dice que yo le de la forma  y el acabado final, cuando era joven soñaba mas con estas imágenes, ahora lo sueño menos” dice en tono triste don Wingard Wilson.

¿Quien puede ser este señor,  que le aparece en el sueño sin rostro?
“Yo siento, que es mi abuelito, que siempre me va enseñando a través de los sueños, como tengo que ir haciendo las artesanías, él le hace las formas y yo les hago el acabado final.”

Facebook: Bilwi En Colores
Twitter    : @BilwiEnColores

1 comentario:

  1. Hola, me parece muy interesante todo lo que está aquí publicado.
    Es fascinante!
    Sería bueno poder ayudar en todo lo posible a ese señor.
    Si me pasan sus datos de contacto, puedo ponerle en contacto con una gente interesada en las cultural indígenas de Nicaragua, con tiendas en Managua y Granada, que de seguro querrán vender sus productos.

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